Gestión de Incidencias Laborales de Guardias de Seguridad
¿Qué son las incidencias laborales en la seguridad privada?
Las incidencias laborales en el ámbito de la seguridad privada hacen referencia a cualquier evento, comportamiento o situación que interfiere con el correcto desempeño del servicio de un guardia de seguridad. Estas pueden ir desde ausencias injustificadas, conflictos internos, fallas en protocolos, hasta accidentes durante la jornada laboral.
Una adecuada gestión de incidencias laborales no solo garantiza el cumplimiento del servicio, sino también protege a las empresas contratantes, al personal operativo y a la imagen de la empresa de seguridad.
Principales tipos de incidencias laborales en guardias de seguridad
1. Inasistencias y retardos
Las ausencias no justificadas o los frecuentes retrasos afectan la continuidad del servicio, disminuyen la moral del equipo y pueden poner en riesgo los activos protegidos.
2. Incumplimiento de funciones
Se da cuando el guardia no cumple con sus rondines, descuida los accesos o presenta una actitud pasiva ante situaciones de riesgo.
3. Problemas de conducta
Incluye actitudes agresivas, uso de lenguaje inadecuado, consumo de sustancias, desobediencia a superiores o falta de respeto hacia el personal del cliente.
4. Falta de presentación o equipo
La omisión en el uso del uniforme completo, ausencia de bitácoras, radios o herramientas necesarias representa una grave falta operativa.
5. Errores en reportes o bitácoras
El mal llenado, falsificación o pérdida de bitácoras diarias afecta directamente la trazabilidad del servicio.
6. Accidentes laborales
Cualquier incidente que ponga en riesgo la integridad del guardia dentro de su jornada debe ser documentado y atendido conforme a la normatividad.
Importancia de la gestión eficaz de las incidencias
Una empresa de seguridad que gestiona correctamente las incidencias laborales demuestra compromiso con la calidad del servicio, la protección legal, y el bienestar de su personal. Además:
· Previene riesgos legales.
· Mejora la retención del personal.
· Refuerza la confianza de los clientes.
· Optimiza los procesos operativos.
Protocolos para la gestión de incidencias laborales
1. Registro inmediato
Toda incidencia debe ser registrada en tiempo real, utilizando bitácoras físicas o sistemas digitales. El formato debe incluir hora, lugar, tipo de incidencia, responsables y testigos.
2. Notificación a supervisión
El supervisor inmediato debe recibir un reporte inmediato, evaluar la gravedad y decidir si se requiere intervención de niveles superiores.
3. Evaluación del impacto
Se debe analizar si la incidencia pone en riesgo la seguridad, afecta la continuidad operativa o representa una violación contractual.
4. Acciones correctivas
Pueden incluir llamadas de atención, cambios de turno, capacitación, rotación de personal, sanciones o inclusive despido en casos graves.
5. Seguimiento y cierre
Cada incidencia debe tener un estatus de cierre, documentando la resolución y las acciones tomadas. Esto alimenta la trazabilidad y mejora continua.
Uso de tecnología en la gestión de incidencias
La digitalización del sistema de gestión ha optimizado el control de incidencias. Entre las herramientas más efectivas se encuentran:
· Aplicaciones móviles para reportes en tiempo real.
· Plataformas web con trazabilidad y seguimiento.
· Geolocalización y geocercas para confirmar presencia en sitio.
· Alertas automáticas a supervisores.
· Dashboards para análisis de patrones y áreas de mejora.
Indicadores clave en la gestión de incidencias
Es fundamental que las empresas monitoreen indicadores que permitan mejorar su desempeño. Algunos KPIs relevantes:
· Frecuencia de incidencias por guardia/turno.
· Tiempo promedio de atención y resolución.
· Porcentaje de incidencias repetitivas.
· Nivel de satisfacción del cliente post-incidente.
· Número de incidencias críticas por mes.
Capacitación como prevención de incidencias
Una estrategia efectiva es la capacitación continua. Algunos temas clave:
· Manejo de conflictos.
· Primeros auxilios.
· Protocolos de emergencia.
· Comunicación efectiva.
· Ética y responsabilidad profesional.
La prevención inicia desde la selección del personal, pasando por la inducción adecuada y la actualización periódica de conocimientos.
Responsabilidad legal ante las incidencias
Las empresas de seguridad están obligadas a cumplir con la Ley Federal del Trabajo, la Ley de Seguridad Privada, así como con las normas ISO 18788 y ISO 31000. No gestionar adecuadamente una incidencia puede derivar en:
· Multas administrativas.
· Pérdida de licencias.
· Demandas laborales.
· Cancelación de contratos con clientes.
El rol del supervisor en la gestión de incidencias
El supervisor operativo es la figura clave en la detección temprana y resolución ágil de incidencias. Sus funciones incluyen:
· Supervisar la puntualidad y cumplimiento de guardias.
· Revisar bitácoras y formatos de reporte.
· Aplicar correctivos de forma justa y conforme a protocolo.
· Retroalimentar a los jefes de servicio y dirección operativa.
Relación entre clima laboral y frecuencia de incidencias
Un ambiente hostil, falta de comunicación o rotación excesiva de personal, pueden disparar la cantidad de incidencias. Por eso es esencial fomentar un clima laboral sano, con canales de comunicación abiertos y programas de reconocimiento al desempeño.
Documentación obligatoria en el expediente de incidencias
Cada empresa debe contar con un expediente de incidencias por elemento, que incluya:
· Actas administrativas firmadas.
· Reportes de incidentes.
· Bitácoras involucradas.
· Fotografía o video (si aplica).
· Firma de enterado del colaborador.
Auditorías internas para control de calidad
La realización periódica de auditorías internas operativas permite detectar patrones de fallas, áreas de oportunidad y aplicar acciones preventivas. Esto garantiza una mejora continua.
Beneficios para el cliente final
Una empresa que gestiona eficazmente las incidencias laborales de sus guardias brinda:
Mayor confiabilidad en el servicio.
· Tiempo de respuesta rápido ante problemas.
· Transparencia en la información operativa.
· Reducción de riesgos legales y operativos.